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Elegir el sistema de ventilación adecuado es vital para evitar que la grasa se impregne en tus muebles y que los olores se esparzan por toda la casa. Aquí te explicamos lo esencial para tu decisión:
La versatilidad de la campana empotrable: Si buscas una cocina minimalista y uniforme, la campana empotrable es tu mejor opción. A diferencia de las decorativas, estas quedan ocultas dentro del mueble sobre la encimera o se integran en el techo, ofreciendo una estética limpia sin sacrificar potencia de succión. Son perfectas para cocinas pequeñas o integradas al living.
La gran ventaja de una campana extractora para cocina Gröner es que es dual.
Extracción (con ducto): Es lo ideal. Expulsa el aire, humo y olores hacia el exterior de la casa a través de un tubo.
Recirculación (con filtro): Si vives en un departamento sin salida de aire, nuestras campanas purifican el aire mediante filtros de carbón activo (que atrapan los olores) y devuelven el aire limpio a la cocina.
Para que una campana de cocina sea efectiva, debe renovar el aire entre 10 y 12 veces por hora. La fórmula simple es: (m² de tu cocina x altura) x 12 = Capacidad de extracción necesaria (m³/h).
Ejemplo: Si tu cocina mide 10 m² y tiene 2,15 m de altura (Volumen de 21,5 m³), multiplicamos 21,5 x 12. Necesitarás una campana que extraiga al menos 258 m³/h.
El ancho es crucial para capturar el humo antes de que se disperse. La regla de oro es que la campana debe ser igual o más ancha que tu placa de cocción. Si tu encimera mide 60 cm, tu campana debe ser de 60 cm o 90 cm para asegurar una cobertura efectiva, especialmente si cocinas mucho con los quemadores delanteros.
Las campanas de isla se instalan ancladas directamente al techo y son exclusivas para cocinas que tienen la zona de cocción en una isla central (separada de las paredes). Además de su función técnica, actúan como una pieza central de diseño vanguardista, disponibles en formas tubulares, cúbicas o curvas, y suelen incluir iluminación LED para mejorar la visibilidad al cocinar.
